PANTUFLAS

EL Arte de NO encajar… PaNTuFLaS 

En tiempos de necesidad de clasificación genérica, de frascos y etiquetas, de estigmatizaciones crecientes aparece un trio musical instrumental que “no encaja”. Desde el underground surge “Pantuflas”: intencionalmente este trio  decide no encajar en las creaciones musicales que realizan, como así no tener respuestas a las preguntas frecuentes sobre género o estilo musical. 

Su formato discográfico y su financiamiento se ponen al margen de los circuitos comerciales habituales, el arte visual y la edición utilizada intenta no responder a los canones buscados por las discográficas y tampoco a la premura auditiva de los oyentes actuales, e incluso resuelven no encajar, una vez más, a la hora de nombrar temas o canciones a los que el mismo trio ha decidido llamar “Paisajes Sonoros”.

 Para “Pantuflas” las formas musicales preestablecidas y  los estereotipos del comercio musical actual han sido suficiente presión para decidir deliberadamente desencajar. Con un primer EP que lleva el nombre de “Persigue” han desafiado al oyente común de todos los estilos a sumergirse en una “deconstrucción auditiva”, si bien el sentido musical espera de formatos tradicionales, de una voz que le cante al oído, de una letra para memorizar en la ducha: Pantuflas persigue la posibilidad de que alguna melodía se quede aferrada al oído del oyente.  

“Persigue” es el primer disco del trio de música experimental, su formación no es tradicional ni responde a un género especifico ni franja temporal, si roza algunas configuraciones del nuevo estilo del PostRock. Dos guitarras eléctricas una de sonido elemental, que conserva la esencia del instrumento más tradicional y una guitarra eléctrica inundada de efectos analógicos que transportan a diversos paisajes sonoros , una batería electrónica que con intención conserva los mejores sonidos y arreglos propios de una batería acústica.

Lo instrumental predomina en primer plano, con armonías disonantes que se arriesgan a interpelar al oído común, la ausencia de “voz” hace que la música se centre en sus colores tonales y armónicos, además de su falta de estructura interna convencional, resalta los arreglos rítmicos inesperados haciendo de la exploración sonora la parte fundamental de la composición y construcción de esta obra.

Nada cumple con el estereotipo instrumental, persigue efectivamente persigue la posibilidad de una nueva escucha para el oyente.